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Un triángulo en la antesala del psicoanálisis

por Sotinel, Thomas

Un método peligroso [1]

Adaptada a partir de una obra de teatro de Christopher Hampton estrenada en Francia en 2009 con el título "La cura por la palabra" (The talking cure), la película A Dangerous Method difiere sensiblemente del resto de la obra de David Cronemberg: se trata de una película de época, en la que la violencia física está prácticamente ausente, y en la que casi todas las imágenes aparecen bañadas por una luz exquisita, helvética y estival.

Esta elegancia formal, que podría pasar por conservadora, no es más que el nuevo envoltorio para las eternas obsesiones del cineasta: la lucha entre el deseo y la razón, las pulsiones y la ley, el mundo real y el mundo soñado.

En las primeras escenas de Un método peligroso se ve a una mujer joven custodiada por guardias que intentan dominarla mientras un carruaje tirado por caballos la conduce hacia lo que se supone será su lugar de reclusión. Sabina Spielrein (Keira Knightley) debe ser internada en un hospital psiquiátrico cerca de Zúrich. Allí, un médico joven y seductor, Carl Jung (Michael Fassbender), experimenta un nuevo método terapéutico, inspirado en los trabajos de su colega vienés Sigmund Freud (Viggo Mortensen).

Gracias a la palabra, la fuerza de esta histeria, que desfigura los rasgos y deforma el cuerpo de la joven, es derrotada y la existencia de Sabina Spielrein retoma su curso, al punto que ella misma se convertirá en una practicante emérita de esa nueva ciencia psicoanalítica.

No obstante, el método es peligroso; tanto el terapeuta como la paciente se ven afectados por él. Carl Jung y Sabina Spielrein deben enfrentar al deseo que nació con el proceso mismo de la cura. Para permitirse sucumbir ante él, Jung recibirá el aliento de Otto Gross, un colega y a la vez paciente, quien dice pertenecer tanto al psicoanálisis como a la anarquía. En este rol, Vincent Cassel despliega una formidable vitalidad maligna, una subversión destructiva. Esta relación, éticamente condenable, entre Carl Jung y Sabina Spielrein complica aún más el vínculo conflictivo con Sigmund Freud, quien anhelaba convertir al médico suizo en su príncipe heredero.

Con seguridad y precisión, Cronemberg pone en escena este gran espectáculo intelectual que se desarrolla en los interiores sobrecargados del consultorio de Freud, en los restaurantes vieneses o en el bello velero que la mujer de Jung le regaló a su marido para navegar por el Lago de Zúrich. La luz resplandeciente, la belleza lejana de la arquitectura, los ambientes increíbles hacen que algunas secuencias parezcan salidas de un sueño o de recuerdos olvidados, estableciéndose un pasaje entre el rigor intelectual de las ideas y los deseos oscuros sobre los que éstas se debaten.

Esos deseos surgen desde el momento en que aparece el personaje de Sabina Spielrein. Una vez atravesadas las primeras etapas de la cura, el rol de excéntrica de Keira Knightley se va suavizando, aunque cada instante de su vida refleja la lucha contra el recuerdo de su locura.

El Carl Jung de Michael Fassbinder, por su parte, es el de de un hombre joven y talentoso que sin embargo no logra liberarse ni de la tutela intelectual de Sigmund Freud ni de la dependencia material de su bella y acaudalada esposa. En cuanto al patriarca Sigmund Freud, Viggo Mortensen lo interpreta haciendo de él un sabio prudente, de una perseverancia inagotable, en una interpretación erudita de la que no está ausente el humor.

Todos viven a la sombra de la catástrofe que se aproxima. Freud le recuerda a Sabina Spielrein que ambos son judíos y que por esa condición, su trabajo será siempre objeto de sospechas y de críticas que de otro modo les serían evitadas. Al finalizar la película, las leyendas que recuerdan la suerte final de los protagonistas son particularmente dolorosas. Sigmund Freud fue expulsado de Viena por los nazis para morir en el exilio en Londres. Sabina Spielrein, que había regresado a Rusia con la vana esperanza de unir los soviets con el psicoanálisis, fue asesinada en 1941 por las tropas alemanas, junto con el resto de la población judía de Rostov del Don. Sólo Carl Jung, suizo alemán, sobrevivió a la guerra.



NOTAS

[1Publicado en Le Monde, Paris, el 21 de diciembre de 2011. Versión en español de Juan Jorge Michel Fariña y Susana Gurovich.

Película:A Dangerous Method

Titulo Original:Un método peligroso

Director: David Cronenberg

Año: 2011

Pais: Canadá, UK, Alemania, Francia

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